Cada uno de los aparatos eléctricos que utilizamos consume diferentes cantidades de energía, dependiendo de su eficiencia energética y de cuánto tiempo lo utilicemos. “Eficiencia energética” es sinónimo de ahorrar energía eléctrica en nuestro hogar, lo cual bajará la demanda y el importe en la factura de luz.

Iluminación: Aproveche la luz natural al máximo, durante el día evite encender lámparas en habitaciones iluminadas por el sol. Las lámparas de bajo consumo consumen cuatro veces menos energía y duran hasta diez veces más. Se deben apagar cuando no estén en la habitación.

 

Computadoras: Al trabajar con la computadora de escritorio, Notebook o Netbook, desconéctela por completo cuando termina de utilizarla. Si hace una pausa, cierre la computadora portatil o apague el monitor. Y configúralas en modo de ahorro de energía automático siempre.

 

Electrodomésticos: Desconecte todo lo que no ocupe. La televisión, equipo de audio, radio, la batería del celular al terminar de cargarlo, licuadoras, microondas, etc. Al final de utilizarlos, el evitar dejar estos aparatos en modo de espera, significará eliminar el “consumo fantasma” en casa, que representa un 5% del consumo promedio. Desenchúfelo. Estos equipos suelen emitir calor, con lo cual también ahorramos en refrigeración.

 

 

 

 

 

Heladera: Es importante colocarlo en un lugar con al menos 5 cm. en cada costado y en la parte superior para que circule el aire. Instalarlo lejos de los rayos solares, el calefactor o estufa, la cocina y otras fuentes de calor. También se debe observar que la puerta cierre herméticamente y que no deje escapar el aire frío. Evitar meter alimentos calientes, pues todos éstos son hábitos que aumentan el consumo energético de este electrodoméstico.

 

Lavarropas: Hay que tratar de llenarlo con la cantidad de ropa indicada como máximo, ya que si pone menos, gastaremos agua y electricidad de más, y si pone más de lo permitido, la ropa quedará mal lavada y se corre el riesgo de forzar el motor. También es importante utilizar agua fría para lavar, y usar el secarropa sólo en época de lluvias o cuando la ropa no pueda secarse rápidamente al aire libre.

 

Plancha: A la hora de planchar acumular la mayor cantidad de ropa posible y regular la temperatura de acuerdo a la prenda que se esté planchando.

 

Tener en cuenta: Los equipos que más consumen energía eléctrica son: el Aire Acondicionado, el secarropa, el lavarropas y el microondas.