En el marco de un plan estratégico, tendiente a brindar seguridad a los empleados que realizan tareas en la vía pública, y como forma de que se sientan acompañados y respaldados cuando realizan sus tareas, el Consejo de Administración está implementando acciones para lograr bajar este tipo de condicionamientos que se presentan en determinados momentos, sobre todo cuando se debe llevar a cabo el retiro de un medidor o se deben realizar tareas en asentamientos irregulares.

En este sentido, el presidente de CALF, Fernando Garayo contó algunos avances respecto de esta problemática y sostuvo que “la inquietud surge a través de los propios empleados y las gerencias que tiene a su cargo a dicho personal, por lo tanto, estamos en tratativas para mantener una entrevista con el Ministro de Seguridad para coordinar medidas de seguridad”.

Por tal motivo y como forma de avanzar en dicha instrumentación de seguridad, las autoridades dispusieron de la incorporación de GPS y botón anti pánico en los vehículos para lograr mantener un contacto permanente y directo con el personal.
“Las cuadrillas cuando salen tienen que tener la seguridad de poder realizar su trabajo. El problema se da generalmente cuando llegan a un lugar a retirar un medidor o en los asentamientos, en donde los habitantes del sector tratan de muy mala manera a nuestros operarios, agrediéndolos de manera verbal y a veces a querer agredirlos de manera física” afirmó Garayo.
“Los vecinos que actúan de esta manera deben entender que nuestros operarios realizan las tareas que le son designadas, las cuales están relacionadas con el mejoramiento del suministro eléctrico. A cada trabajador, lo espera una familia en su hogar. Y nosotros como autoridades tenemos la obligación de brindarles medidas de protección” aseveró el titular del Consejo de Administración.