Cambiarán las condiciones de los últimos días y habrá un marcado descenso en las térmicas.

Después de varios días de verano agobiante, llega un respiro climático a la región que disminuirá las máximas, pero traerá a la par algo de lluvias, inestabilidad y viento. Ese marcado descenso de la temperatura se sentirá desde este jueves en las regiones de la cordillera, centro de la provincia de Neuquén y Río Negro, región sur, este rionegrino y costa atlántica.

De acuerdo a lo informado por la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC), el pasaje de un frente frío desde el Océano Pacífico mantendrá la probabilidad de lluvias en cordillera con períodos de viento, heladas y neviscas en montaña.

Por su parte, se registrará inestabilidad en los valles y meseta, con probable formación de tormentas eléctricas y lluvias hacia las noches de jueves y viernes; y se mantienen los vientos del sudoeste que se intensifican el sábado con el ingreso de un nuevo pulso frío.

En tanto que habrá un paulatino ingreso de aire frío y húmedo con vientos del sudeste sobre la zona este de Río Negro y costa atlántica, acompañados por períodos inestables y nubosos con formación de tormentas y probabilidad de lluvias. Esas condiciones se intensifican a partir del sábado, con vientos regulares y ráfagas fuertes del sur.

Estas condiciones se mantienen hasta el lunes inclusive.

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